Hiperplasia Benigna de Próstata: Información General

La hiperplasia benigna de próstata (HBP) es el crecimiento benigno de la próstata, que ocurre en la mayoría de varones a partir de los cuarenta años de edad. Este crecimiento puede depender de muchos factores, como los genéticos, hormonales, y sobre todo hábitos de vida.

Entre los hábitos de vida más asociados a la hiperplasia benigna de próstata, se encuentran, por ejemplo:

  • Estreñimiento
  • Falta de consumo de fibra
  • Elevado consumo de almidones
  • Consumo de harinas procesadas
  • Ingesta de azúcares
  • Falta de actividad física
  • Sedentarismo crónico
  • Infecciones prostáticas a repetición

La hiperplasia benigna de próstata usualmente tiene múltiples mecanismos por los cuales se puede presentar, los más frecuentes están asociados a:

  • Inflamación crónica persistente de la vía urinaria
  • Relaciones sexuales
  • Estreñimiento
  • Hemorroides
  • Falta de consumo de agua

También se ha asociado a desequilibrios hormonales como un exceso de un subtipo de hormona femenina llamada estrona o a un déficit de progesterona o un exceso de dihidrotestosterona (DHT).

Esta hiperplasia puede ir asociada o no a otro tipo de enfermedades de la próstata, como la prostatitis, la prostatodinia o el cáncer de próstata. La presencia de uno no excluye la presencia de otro. Para el diagnóstico es fundamental la consulta médica, en donde el médico evalúa Tests como el IPSS (Índice prostático de síntomas y signos), que se evalúan en la consulta médica. Pueden ser necesarios exámenes como:

  • Ecografía de riñón, vejiga y próstata
  • Antígeno prostático específico (PSA)
  • Flujometría computarizada

Los síntomas más comunes son:

        Aumento de la frecuencia urinaria en el día (polaquiuria)

        Aumento de la frecuencia urinaria en el día (nicturia)

        Urgencia para orinar

        Chorro disminuido

        Chorro intermitente o entrecortado

        Chorro bifurcado

        Sensación de no haber orinado todo (tenesmo)

        Goteo terminal

        Retención urinaria (no poder orinar)

 

1.       Cistoscopia

Usualmente pedida cuando hay sospecha de cáncer de próstata, cáncer de vejiga o alguna otra enfermedad asociada.

2.       Urodinamia

Cuando hay presencia de daño de la vejiga (vejiga hiperactiva).

El tratamiento de la hiperplasia benigna de próstata va a depender de muchos factores, como la edad del paciente; el tamaño de la próstata; el porcentaje de retención urinaria del paciente; la presencia o no de otras enfermedades del paciente; la intensidad de los síntomas y la calidad de vida que el paciente manifiesta; así como sus expectativas (querer tener más hijos/seguir eyaculando/preservar la erección/rapidez en la recuperación/enfermedades asociadas como glaucoma). Según esto definiremos una gran variedad de tratamientos según el paciente. Entre ellos tendremos:

1. Tratamientos naturales:

Existe una gran diversidad de productos naturales que pueden ayudar a los problemas de hiperplasia benigna prostática o los problemas prostáticos leves.

Entre los más usados se encuentran:

  • Saw palmetto
  • Achiote
  • Maca roja
  • Huamanpinta
  • Cúrcuma
  • Guanábana

Los cuales pueden ir asociados o no a otros productos para su máxima eficacia.

Es necesario una consulta médica para poder definir cuál es el mejor tratamiento. Estos productos suelen ser usados de manera preventiva para aquellos pacientes que desean disminuir la probabilidad de tener un problema prostático a futuro o tienen antecedentes familiares de alguien que haya tenido algún problema de hiperplasia benigna de próstata.
*No aplica para cáncer.

Algunos de los productos conocidos más utilizados son el P-ZEN, cuyo componente principal es la hamaca roja, y el HPB CONTROL, cuyo componente principal es el saw palmetto. (linkear productos a BIENESTI)

2. Tratamiento farmacológico:

Los tratamientos farmacológicos pueden dividirse en dos grupos:

a. Inhibidores de la 5 alfa reductasa

Que van a disminuir la concentración de dihidrotestosterona y, por lo tanto, van a producir una disminución del volumen de la próstata, su uso deberá ser discutido con el paciente debido al riesgo de efectos reversibles o reversibles que pueden ocurrir en el paciente como:

    • Falta de deseo sexual
    • Disfunción eréctil

Y otros problemas hormonales que han sido descritos en pacientes que han usado inhibidores de la 5 alfa reductasa. Los dos inhibidores más usados en el país en la actualidad son el finasteride y el dutasteride.

b. Bloqueadores alfa adrenérgicos

Son sintomáticos, debido a que buscan disminuir los síntomas de la de la próstata, no tienen un objetivo curativo. Entre ellos, el más usado es la tamsulosina, seguido de la doxazosina, la terazosina, y la alfuzosina, etc.

c. Inhibidores de la 5 fosfodiesterasa

Clásicamente usados para el tratamiento de los problemas de erección, el tadalafilo también ha demostrado su utilidad en disminuir los síntomas de la próstata. Usualmente, se prefiere este medicamento en pacientes que tienen problemas de erección, además de problemas de la próstata. Todos los medicamentos arriba mencionados pueden ser tomados de manera separada o combinadas, siempre evaluando con el paciente los pros y contras de asociar dichos medicamentos. También los productos naturales pueden ser combinados con los tratamientos farmacológicos, algo que debe ser discutido con el paciente para encontrar el mejor tratamiento.

3. Tratamientos quirúrgicos

Existe una diversidad de tratamientos quirúrgicos para los problemas de hiperplasia benigna de próstata, en donde cada uno de ellos puede ser mejor o peor según las expectativas y las características del paciente. Entre los más conocidos se encuentran los tratamientos con láser. Entre ellos se encuentran:

a. HOLEP

Posiblemente, el procedimiento con mayores beneficios a nivel mundial, debido a su gran capacidad de retirar próstatas de casi todo volumen. En mi experiencia personal he podido retirar próstata hasta de trescientos cincuenta gramos sin problemas por este método. Usualmente, este método utiliza un láser HOLMIO pulsado, que permite funcionar como un bisturí láser que diseca la próstata separándola de su cápsula, con un mínimo sangrado y mínimos riesgos o complicaciones. En el año 2016 desarrollé un método llamado Enucleación en Bloque, el cual permite retirar próstatas de gran volumen en corto tiempo, teniendo una recuperación muy rápida. Usualmente la recuperación del paciente es en menos de 24 horas, requiriendo el uso de sonda por 2 a 3 días según el caso. A la mayoría de pacientes que vienen del extranjero se les pide que permanezcan en Lima 1 semana antes de poder retornar a su lugar de origen.

Entre las principales ventajas del láser Holmio se encuentran:

    • No hay límite de tamaño
    • Mínimo sangrado
    • Mínimos problemas de erección
    • Mínimos o nulos problemas de incontinencia urinaria
    • Tiempo operatorio muy rápido
    • Mínimo o nulo dolor
    • Ausencia de cortes
    • Recuperación extraordinariamente rápida.

Un efecto negativo del láser HOLMIO es que casi todos los pacientes tendrán eyaculación retrógrada, siendo tal vez este el único efecto secundario que puede tener esta cirugía.

En la actualidad, hasta noviembre del 2023, llevo realizado más de 3 000 procedimientos, siendo probablemente el segundo médico con mayor experiencia en Latinoamérica en el uso de este láser. Técnicamente, es una cirugía difícil de aprender, por lo cual muy pocos médicos en el país la realizan.

b. Rezum

Es un método desarrollado para próstatas de pequeño y mediano tamaño. Idealmente, se recomienda para próstatas de 60 g a 80 g como máximo, y está indicado en aquellos pacientes que son de edad muy avanzada, de un riesgo quirúrgico muy alto; pacientes muy delicados o pacientes que quieren preservar su capacidad reproductiva, debido a que cerca del 90% de los pacientes operados con este método preservan su eyaculación.

Es un procedimiento que dura entre 7 y 10 minutos. Es ambulatorio, pero luego del mismo, el paciente tiene que usar una sonda entre 5 a 10 días, según sea el caso. Este método es bastante indoloro, con una recuperación bastante rápida, y que, según los estudios, puede asegurar hasta 8 años de un paciente libre de síntomas urinarios.

En mi experiencia personal, utilizo este método para aquellos pacientes que quieren seguir eyaculando, y en aquellos pacientes en donde el riesgo de una anestesia es muy alto.

c. RTU Bipolar

Otras técnicas que también se utilizan para este problema son la RTU Bipolar, considerada a finales del siglo pasado como la Gold Standard, todavía utilizado en muchos lugares para el tratamiento de próstatas pequeñas y medianas, es considerado por mi persona como el tercer mejor método disponible en el Perú. Esta, es una cirugía que permite operar próstatas de gran volumen (no tanto como el láser HOLMIO), pero a un costo menor. El sangrado también suele ser pequeño y la recuperación tiende a ser bastante rápida. Tiene la ventaja que técnicamente es una cirugía muy fácil de aprender por lo cual la gran mayoría de los médicos en el país la realizan.

d. Láser verde o Greenlight

Ideal para próstatas pequeñas y medianas, tiene la particularidad de tener una recuperación bastante rápida. Ha sido muy dejado de lado en la actualidad por la incursión del Rezum, con un método con resultados muy comparables, al cual se le agrega de que por su parte el Rezum preserva la eyaculación, algo muchas veces deseado por un grupo de pacientes.

e. Láser Thulium / Láser Superthulium

Son parecidos al láser HOLMIO, que permiten retirar también próstatas de gran tamaño, con mínimo sangrado. Personalmente, no los utilizan mucho debido a que en algunos casos pueden generar algún tipo de irritación que puede ser incómodo para el paciente. Además de que puede ser difícil distinguir los planos anatómicos durante la disección, lo cual puede llevar a dejar adenoma prostático que eventualmente podría volver a crecer.

f. Cirugía abierta

Era considerado un estándar en la década de los 70’ y 80’ del siglo pasado, todavía es usado en algunos lugares en la en la actualidad para próstatas de gran volumen. Personalmente, no realizo este método desde el año 2012, donde realicé la última cirugía abierta.

Si bien es un método bastante bueno, tiene el problema del sangrado y la recuperación que a veces puede ser dolorosa para el paciente, además de los riesgos de efectos secundarios o complicaciones que pueda tener el paciente como incontinencia urinaria o disfunción eréctil, además de las infecciones de la herida operatoria e infecciones urinarias que puedan ocurrir. Como les menciono, es muy importante saber los deseos del paciente, el tamaño de la próstata y las enfermedades concomitantes para poder decidir cuál es el mejor tratamiento para el paciente.

Si tienes alguna duda o deseas más información, te invito a ver el siguiente video.

Tratamiento de primera línea para, a través de corriente eléctrica controlada, disminuir los síntomas de dolor y frecuencia urinaria en varones con prostatodinia.